Carta: suicida

Siento no poder decir más,
ya estoy harto de la vida,
no debí vivir jamás
el dolor se olvida.

La ausencia de felicidad me hace daño
aún extraño
y es que aún no maduro
paso los días pensando que me mandan lo mas duro.

Te aseguro que después de reclamar
voy a morir
nunca mas voy a llorar
aún así no quiero existir
ni recibir mas noticias pésimas
quiero abandonar este mundo de personas pérfidas.

Cada segundo, cada día es mas difícil para mi.
Lo único bello fue el día en el que te conocí.
Odio las despedidas, las partidas perdidas
odio tener que compartir mi estúpida vida
junto al malvado mundo que me atrapa,
no tengo valor pero mi alma se escapa
no servirían mas poemas
ni aquellos temas
que me animan.

Sé que cualquier cosa hará que me deprima,
más cerca veo mi muerte
una navaja que recorre mi brazo
la sangre no me causa repulsión, por suerte
nada me podría parar tan cerca y a la vez tan lejos
desde la sombra, penumbra que me consume
mi vida refleja aflicción en un espejo.

Yo hago lo que quiera, me pertenece
la dicha me abandona y el dolor crece
yo acabo con mi vida y mi alma
a nadie le pertenece, solo así descansaría en calma.