Todo acabó...
Hasta nunca digo hoy
a aquella vida de bohemio que llevo,
hasta nunca música,
dibujo y literatura;
que en paz descansa tanto talento,
desperdiciado por cierto.
Muerte a mis ideales,
muerte al neoidealismo,
hoy sobre todo,
queda realidad.
Cruel y pérfida, realidad.
Y caminaremos juntos mucho más tiempo,
por el ruinoso sendero de nuestras vidas
y el gran suspiro de amor